Sobre mí Sofía C.
Mi primera experiencia con los perros fue a los once años. A esa misma edad habia dejado de tener esa inseguridad de saber si algún perro me mordería o no. Gracias a mis padres pude hacerlo. Tenía unos amigos y amigas que tenian cacorros o perros mas mayores. Por lo tanto, quedaba con ellos y sus padres para jugar con los perros. A veces podía cuidarlos yo junto con mi hermano. Mi primera vez al jugar con un perro a los once años, sentí felicidad, diversión, seguridad y muchas risas de por medio. Estos animales, en especial los cachorros me hacian ilusión y cada vez quería más a los perros. Comencé a desarrollar ese amor tan bonito hacia ellos desde esa edad. También quise tener un perro o cachorro como mascota. Y lo tuve, fue y sigue siendo mi primer perro que tengo. Tener un perro implica responsabilidad y yo lo sabía cuando lo adopté. Me hice cargo de él y sentí una felicidad inmensa cuando lo tuve conmigo. Era como una madre cuidand...
Mi primera experiencia con los perros fue a los once años. A esa misma edad habia dejado de tener esa inseguridad de saber si algún perro me mordería o no. Gracias a mis padres pude hacerlo. Tenía unos amigos y amigas que tenian cacorros o perros mas mayores. Por lo tanto, quedaba con ellos y sus padres para jugar con los perros. A veces podía cuidarlos yo junto con mi hermano. Mi primera vez al jugar con un perro a los once años, sentí felicidad, diversión, seguridad y muchas risas de por medio. Estos animales, en especial los cachorros me hacian ilusión y cada vez quería más a los perros. Comencé a desarrollar ese amor tan bonito hacia ellos desde esa edad. También quise tener un perro o cachorro como mascota. Y lo tuve, fue y sigue siendo mi primer perro que tengo. Tener un perro implica responsabilidad y yo lo sabía cuando lo adopté. Me hice cargo de él y sentí una felicidad inmensa cuando lo tuve conmigo. Era como una madre cuidando a un bebé. Fue el regalo que siempre quise y deseaba. Tengo muchi cariño a estos animales. Me gusta considerarlos y pensar que son como amigos que no te van a fallar, pase lo que pase. Considerarlos como una familia, como un miembro familiar más. Porque para ellos nosotros somos los único que tienen. Y aveces en ocasiones, para nosotros ellos son lo único que tenemos. Desde entonces, me encanta jugar con ellos, que se diviertan y más. Me gustaría ser cuidadora de estos animales, por el amor que siento hacia ellos. Por las sonrisas que me sacan y por lo cariñosos, divertidos y leales que son.